La mañana del lunes día 3 de febrero disfrutamos de la visita de los alumnos de ESO del Colegio Especial de San Jorge que gestiona la asociación ASPACE. A las 11,30 h. llegaron 19 alumnos (de entre 12 y 20 años de edad) acompañados por 10 profesores y asistentes educativos que facilitaron los traslados en ascensor de las sillas de ruedas a la sala de patio cubierto donde se realizó la primera parte de la actividad. Fueron recibidos por todos los alumnos de 4º de ESO. José Ángel, en nombre del centro, dio la bienvenida a todos e introdujo el objetivo inclusivo con el grupo de alumnos de gran heterogeneidad de afectación neurológica que está detrás de esta jornada de convivencia. Seguidamente, se dio comienzo al circuito que Vero había preparado de tres estaciones de actividades en las que los alumnos de nuestro centro estuvieron muy activos y facilitaron con sus ánimos a crear un ambiente distendido que invitaba a la participación de los alumnos de ASPACE.
Vero, como profesora del aula de Educación Física, veló por la participación de los alumnos y la rotación de las actividades. Dispuso 3 estaciones con las actividades siguientes: derribar torres de ladrillos con pelotas de diferentes texturas adaptables a las capacidades de los participantes; lanzar pelotas dentro de una serie de aros verticales u horizontales e intentar pasar aros por una serie de picas verticales. Cada grupo de de 6 o 7 alumnos de ASPACE, asistidos por su profesores y monitores, facilitaron la actividad a los diferentes niveles de discapacidad que había. Los alumnos de 4º de ESO disfrutaron de ayudar y animar en la actividad, mostrando mucho interés y curiosidad por la singularidad de las diferencias funcionales que había entre los participantes. Los aplausos, ánimos e interacciones se fueron sucediendo de forma cada vez más intensa. A la una menos venticinco , nos trasladamos a la sala de relajación donde se había preparado una actividad que los alumnos del colegio presentaron, consistió en un baile muy variado donde se produjeron corros, parejas, tríos de alumnos de ambos centros y se propuso la realización de la parada en estatua cada vez que cesaba la música. Se lo pasaron muy bien y disfrutaron hasta las 13,10 h, momento en que nos despedimos con escenas muy tiernas y afectuosas entre ambos grupos, para proceder, finalmente, a recoger el material y ayudar desplazar a los alumnos de ASPACE al ascensor y de allí, a las furgonetas para ir a comer.
Se observó a unos profesionales de ASPACE entregados y muy agradecidos y nos trasladaron su deseo de tener un nuevo reencuentro en su propio centro. La profesora Begoña, nos dio las gracias en nombre de todos los participantes y nos expresó que había sido un día especial para sus alumnos y profesionales de ASPACE que deseaban repetir algún día en el formato que fuera.
Nuestros alumnos, muy receptivos, cariñosos y acogedores, convivieron con personas con discapacidad motora y neurológica con la que empatizaron, se relacionaron y compartieron la alegría de los logros en las habilidades y destrezas realizadas de los alumnos visitantes. Hemos quedado muy satisfechos y animados en continuar estos encuentros en lo sucesivo porque nos aportan a ambas partes el comprender qué es una sociedad inclusiva y el respeto al derecho a ser diferente.